Descripción
En el corazón del West End londinense, donde late la vida cultural de la ciudad, descubrimos esta joya histórica inaugurada en diciembre de 1907. Más que una estación, es un portal al mundo del teatro: aquí convergen las rutas hacia los espectáculos más emblemáticos. La leyenda urbana habla de un habitante inesperado - el espíritu del célebre actor William Terriss, cuyo trágico final en 1897 marcó el inicio de misteriosas apariciones. Curiosamente, en los tiempos de su construcción, los trabajadores frecuentaban la tradicional Adelaide Bakery, establecimiento que el propio Terriss solía visitar y que hoy forma parte de esta cautivadora historia.